viernes, 28 de junio de 2013

Vides y Olivos visita El Arbol de la Vida






Al acabar la visita, nos espera una bebida refrescante y natural: agua de limón y menta
Restaurante Villa Mama´s, Manama
Este restaurante, que mima el producto autóctono, es  reciente un ejemplo emprendimiento en Baréin.
 En medio del desierto, acudimos a visitar a un anciano de 400 años,  el árbol de la vida. Nos atrajo su nombre. Lo encontramos solo, cual eremita. Según dice la leyenda, prevalece para señalarnos dónde se situaba el mítico jardín del Edén. No podíamos dejar de reunirnos con este árbol con raíces tan profundas. Es un misterio su verdor. La luz,  y un calor seco,  lo inunda todo. Observamos cómo muchas de sus ramas se sostienen con bastones. Es de las familias de las acacias. Decimos del olivo y su fortaleza, pero al conocer la existencia de este árbol, comprendemos que siempre podemos descubrir una nueva frontera, alguien más fuerte, incluso en uno mismo.

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